Dios apacienta su pueblo comprado y adquirido a través del Espíritu Santo, pero como Espíritu necesita de una mediación humana y tal medio es lo que se puede denominar Siervo;
Números 27, 16 y 17:
“ Ponga Jhv, Dios de los espíritus de toda carne, un varón sobre la congregación,
27:17 que salga delante de ellos y que entre delante de ellos, que los saque y los introduzca, para que la congregación de Jhv no sea como ovejas sin pastor”.
27:17 que salga delante de ellos y que entre delante de ellos, que los saque y los introduzca, para que la congregación de Jhv no sea como ovejas sin pastor”.
Es con toda Rozón o por relación un “ungido” y sin esa unción dada, no es un Siervo. Todo Siervo debe ser y es un escogido para ser usado por el Santo Espíritu, sabe que esta verdad da temor ante Dios y nos insta a andar también en el temor de Dios. Tenemos un lugar entre Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, lo cual nos lleva a la necesidad de sentirnos cada vez más santos o apartados para ser dignos de ser sus ministros. Recuerdo a Jonás, quien cumplió en medio de luchas con Dios y consigo mismo con lo encomendado por Dios, pero no pudo superar la rebeldía y contención con su Señor.
Todos los convertidos arrepentidos aceptados por Dios, llevan su sello o unción y la función principal que ejerce el Espíritu Santo en todos es la regeneración o renovación, la cual cada vez nos aleja del estado de pecadores a la santificación y por consecuente a dar Honra a Dios.
La Honra es hacer lo que agrada y espera Dios en mí y de mí, más que una expresión verbal, es una expresión de todo el ser con la Actitud, Acción y Disposición ante Él. (Es fácil vivir la Religión del Lenguaje y difícil para algunos la Religión de la Practica). Los Sumos sacerdotes del Antiguo Testamento comprendían esta verdad y por tal razón cumplían cabalmente con demandado por Dios antes de ingresar dentro del Lugar Santísimo.
Nehemías 12, 30; Ef. 5, 26 y He 10, 22:
“Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura”.
Los siervos no pueden ni deben pretender que Dios se manifieste con su poder a través suyo, sino esta debidamente preparado para ese propósito ante el Dios que quiere se manifieste.
El Rey Ezechias quería conducir al pueblo de Israel a un gran avivamiento religioso espiritual, pero tenia algo primero a su favor, Dios solo se manifestaría en la forma que el esperaba cuando cumpliera realmente con sus demandas para bendecir. Todos podemos hacer lo que Dios espera en cuanto anunciar sus propósitos y demandas, pero no hacerlo siempre como y en la manera que el realmente demanda de cada uno de nosotros. Es por eso que el Rey hiso los preparativos y se preparo así, 2 Crónica 29, 1 al 5:
“29:1 Comenzó a reinar Ezequías siendo de veinticinco años, y reinó veintinueve años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Abías, hija de Zacarías.
29:2 E hizo lo recto ante los ojos de Jhv, conforme a todas las cosas que había hecho David su padre.
29:3 En el primer año de su reinado, en el mes primero, abrió las puertas de la casa de Jehová, y las reparó.
29:4 E hizo venir los sacerdotes y levitas, y los reunió en la plaza oriental.
29:5 Y les dijo: ¡Oídme, levitas! Santificaos ahora, y santificad la casa de Jhv el Dios de vuestros padres, y sacad del santuario la inmundicia”.
29:2 E hizo lo recto ante los ojos de Jhv, conforme a todas las cosas que había hecho David su padre.
29:3 En el primer año de su reinado, en el mes primero, abrió las puertas de la casa de Jehová, y las reparó.
29:4 E hizo venir los sacerdotes y levitas, y los reunió en la plaza oriental.
29:5 Y les dijo: ¡Oídme, levitas! Santificaos ahora, y santificad la casa de Jhv el Dios de vuestros padres, y sacad del santuario la inmundicia”.
Las puertas del Templo estaban cerradas desde el Rey Acház, quien gobernó por veinte años . El pueblo de cerca había conocido la idolatría en especial al dios moloc., 2 Cr. 28, 24 al 25.
Los Sacerdotes habían pecado, 2 Cr. 29, 34. Todo daba para desear un avivamiento de restauración tanto de la nación como de los Sacerdotes. Hoy se pueden dar restauraciones emocionales externas y existen los mecanismos aprendidos para lograrlos. Dios revelo un sueño en dos momentos. En el primero habían unas escaleras de madera color cafés pegadas a las paredes del Templo (La forma del lugar de congregación era más bien de un edificio de unos tres pisos y no Templo). Lo llamo templo para decir que era el lugar de congregación y adoración a Dios. Las escaleras terminaban en lo que aparentemente era el Cielo y una voz dijo: “ El Cielo al cual suben no es el cielo, es un Cielo falso y los que lo ven creen que es verdaderamente el Cielo”; “Todos suben y cuando quieren bajan, pero no en lo forma que quiero” y mostro como al frente de dicho lugar se podía ver por momentos el rostro de un predicador famoso y dijo: “ mas ven y buscan la presencia de él que la mía”. Del Cielo falso luego salieron Rayos y se escuchaban Truenos y no se podía entender porque era posible;
Así es el engaño,¡ no todo proviene del verdadero Cielo..! . Fueron las últimas palabras de la voz. Emociones infundidas y mecanismos pueden hacer ver lo que se quiere, pero no es el verdadero avivamiento. ¡Hay verdaderos avivamientos dados por Dios, pero hay que prepararse y prepararnos para recibirlos..!. De eso era consiente el Rey Ezechías.
29:11 Hijos míos, no os engañéis ahora, porque Jhv os ha escogido a vosotros para que estéis delante de él, y le sirváis, y seáis sus ministros, y le queméis incienso.
Siervo, Roberto Fonseca Murillo.